Debería ser perfumado
impregnándome el pecho
con el más potente dulzor
lleno de color que casi lo sientes latir
y una suavidad que se desliza y eriza
pero solo me he encontrado espinas
adornandome de peligroso carmesí
hojas resquebrajadas se van
asemejando a mi piel
no sé en que me estoy convirtiendo
no sé si quiero huir
no sé si debo sequir
no sé si quiero parar
solo se que entre aqui
por que algo me miraba
y ahora ya no veo nada
Cada paso es un martirio pero
es que yo quise entrar
me asome por la rendija
y no pude mas.
